Por Sofía Smolar
La historia de Beleza Natural es la de una ex empleada doméstica, un ex taxista y dos empleados de McDonald’s, que en 1993 comenzaron a interiorizarse en la búsqueda de una solución al cabello rizado en Brasil, pero que más tarde terminarían siendo los responsables de una transformación mucho más profunda de la belleza a nivel mundial. Todo inició cuando Heloisa Asis, Zica, decidió emprender, junto con su marido Jair, una investigación para encontrar fórmula contra la rebeldía del pelo. En medio de la investigación, Leila y su amigo Rogério –que en ese entonces trabajaban en la empresa de comida rápida– comenzaron a participar de las investigaciones de su amiga Zica como conejitos de india. Todo muy amateur, poco creíble, pero divertido. En esos tiempos, ninguno de los cuatro se hubiese imaginado que luego de pruebas y errores se convertirían en expertos. Hoy cuentan con más de 3 mil empleados y atienen más de 100 mil empleados todos los meses.
El bello salto hacia la fama
Una vez que todos acordaron que el producto estaba listo para ser comercializado, buscaron la ayuda de una persona que sabía cómo registrar una idea como esta y cómo armar una estructura formalizada. Junto a esta información, se sumó la experiencia que Leila y Rogério habían adquirido en McDonald’s, lo cual ayudó entender cómo se puede transformar una empresa local en una multinacional con presencia en el mundo entero.
En 1993, los socios abrieron el primer salón en el barrio de Tijuca, en Río de Janeiro. Consiguieron aplicar un proceso con una calidad mucho superior porque, por su aprendizaje, sabían que un trabajador que está varias veces en la misma cosa de una forma completa tiene una velocidad mucho mayor que uno que hace todos los procesos con las diferentes técnicas que el servicio exige.
El concepto de la realidad
“Decidimos enfocarnos en lo que era nuestra realidad, porque nuestros clientes eran muy parecidos a nuestra realidad. Personas que querían una solución para la transformación del cabello, pero que querían que fuese con un valor accesible, en un ambiente copado, respetuoso y bien decorado. Eso no existía hasta ese entonces en Brasil”, cuenta Velez, y continúa: “También Beleza Natural nació de un concepto que era más que un servicio o del producto, era una experiencia de relacionamiento con el consumidor muy especial. Nosotros logramos transformar esa casita que tenía unos 30 metros cuadrados en un lugar en el que las personas iban para resolver su autoestima. Transformarse en personas más felices, no simplemente más bonitas”.