A los grandes productos mendocinos, como el vino y los aceites -sin contar sus hermosos paisajes- hay que sumarle alfajores. Y así es como este matrimonio buscó sumar un nuevo aliado a la cartera de opciones locales, con una receta única y original.
Ellos son Ariel y Constanza, trabajaron años en relación de dependencia hasta que se dieron cuenta que querían construir su propia compañía. Se conocieron trabajando en una empresa elaboradora de milanesas de soja, se pusieron de novios y buscaron más. El ingrediente secreto: aprender a complementarse, cada uno desde lo que mejor sabían hacer.
En esta nota, la historia detrás de la empresa, sus desafíos y logros, de la mano de Ariel Fabrizio, cofundador de Entre Dos.
Endeavor: ¿Cómo se dividen las responsabilidades?
Ariel Fabrizio: Mi mujer por su formación académica (Bromatóloga y Nutricionista) está mas abocada a la producción y desarrollo de producto. A mí siempre me gustó mucho la parte comercial. Así nos complementamos.
Endeavor: ¿Cómo es emprender en pareja?
AF: Es un doble desafío, no es sencillo compartir nuestro trabajo con todas las actividades que conlleva una familia – en nuestro caso con 4 niñas. Pero de todos modos, si lo vemos a la distancia entendemos que fue bastante “fácil” porque los roles están bien separados. Constanza está en el área de produción y yo en el área comercial. Y cada uno está muy bien en su ámbito. No nos seduce el área en donde está el otro. Aprendimos a complementarnos bien.
Endeavor: ¿Quiénes fueron tus primeros aliados?
AF: Desde el día 1 decididmos convocar a distribuidores que nos ayudaran en la distribución de los productos. Fue una decisión que nació con el emprendimiento, una manera de comercializar nuestros productos para poder crecer.
Endeavor: ¿Cómo fue el día 1?
AF: El día 1 es difícil porque siempre creés que te falta algo, pero tambien es cuestión de empezar. El día 1 no tenés la receta, sabés lo que querés pero no tenés el nombre de la marca ni el diseño del packaging. Pero siempre hay gente que te da una mano, te ayuda y hay que animarse a dar ese primer paso. Entonces la receta se consigue probando, haciendo más pruebas hasta que lo lográs.
Para mí lo más dificil – aunque yo venía del área de ventas – fue salir a dejar las primeras docenas de alfajores en un almacén en donde me conocían porque comprabamos siempre en ese negocio. Me costó animarme a dejarle los alfajores y contarle que lo había elaborado en mi casa. Quizás yo pensaba que no me iba a costar porque venía trabajando en ventas, pero para terceros y otros productos. El tema es que me costaba porque los productos eran propios, da temor y que te digan que no pero bueno el tema es romper esos miedos internos y dar el primer paso.
Endeavor: ¿Cuánto atravesaron para llegar adonde están hoy?
AF: Sacrificios tuvimos un montón, muchísima austeridad y control. Todo lo que fuimos generando lo fuimos reinvirtiendo, no desviamos ningún recurso. Al comienzo, cuando seguíamos trabajando en relación de dependencia y a la vez iniciando el emprendimiento, no nos fuimos de vacaciones justamente para comprar alguna máquina, así como los aguinaldos invertirlo en insumos. Fueron bastantes sacrificios personales y familiares, nuestras hijas eran pequeñas y era más sencillo que nos acompañaran en este sentido. Fue un sacrificio familiar: el descanso, las vacaciones, no comprar ropa nueva etc. Implicaba el sacrificio de todos no sólo de nosotros. Todo esto nos permitió arrancar.
Endeavor: ¿Por qué alfajores?
AF: Somos consumidores fervientes de esa golosina y notamos que ahí había una oportunidad. Nos dimos cuenta que algunos alfajores que usualmente consumíamos variaban su receta, su sabor, su calidad. Entonces vimos que podíamos desarrollar un producto que pudiera conservar su calidad y sabor en el tiempo.
Nuestra vida era bastante austera, con nuestras hijas pequeñas, nuestra salida del fin de semana era alquilar una película y comprarnos alfajores artesanales. Es por eso que conocíamos lo que había en el mercado y como fans de esta golosina nos preguntamos porqué no incursionar y desarrollar un producto con una receta original y novedosa.
Endeavor: ¿Hace cuántos años que liderás la compañía?
AF: Este año cumplimos 12 años. Somos los fundadores y seguimos al frente del proyecto ambos.
Endeavor: ¿Por qué el nombre de la marca?
AF: El nombre de la marca, en primer lugar, tiene que ver con el espíritu del nacimiento del proyecto. Emprender junto con mi esposa, emprender entre dos. Además también viene reforzado por el significado específico de la definición que encontrás en el diccionario cuando buscas la palabra alfajor, un relleno de dulce o mermelada entre dos tapas circulares.
Endeavor: ¿Qué diferencia a sus alfajores de los demás?
AF: Uno de los distintivos de nuestros alfajores es que más de de la mitad del peso del alfajor lo constituye el relleno de dulce de leche o mermelada según corresponda. Y otro gran distintivo, que nos diferencia totalmente de otras marcas es la receta original de nuestra tapita. Nosotros elaboramos nuestra tapa basándonos en una receta propia y ahí es donde vemos el gran diferencial, exclusivo de desarrollo propio.
Endeavor: ¿Cuál es el alfajor preferido por el público?
AF: Uno de los alfajores que más elige el público es nuestro Alfajor de chocolate con dulce de leche al ron. Fue un producto que desarrollamos en el primer invierno del emprendimiento 2008, orientado a un consumo invernal y considerábamos que iba muy bien con bebidas calientes. Fue un éxito y nunca más dejamos de producirlo. De hecho fue nuestro alfajor premiado en el 2017 en la Fiesta Nacional del Alfajor como el Alfajor de chocolate más rico del país.
Dado su protagonismo tambíen decidimos lanzar dos sabores más que lo acompañen formando nuetra Trilogía de Espirituosos: Alfajor de chocolate con dulce de leche al whisky y al cognac.
Endeavor: ¿Y el tuyo?
AF: En cuanto a mi alfajor preferido, tengo varios pero el de Hojaldre de Chocolate y nuestro Clásico de Chocolate negro con dulce de leche.
Endeavor: ¿Y de otras marcas?
AF: Todo lo nuevo que hay en el mercado lo pruebo, todo desarrollo que encuentro lo pruebo porque me gusta estar al tanto de todo lo que hay. Si tuviera que elegir uno por el tiempo que llevan como marca, por el producto que han logrado desarrollar y porque son un referente acá y afuera es Havanna. El alfajor de 70% cacao es uno de mis favoritos. También hay marcas que no son industriales y que son muy ricos y de buena calidad como La olla de Cobre y El Nazareno de Mina Clavero.
Endeavor: ¿Exportan a otros países?
AF: El año pasado comenzamos el desarrollo de exportación hacia Chile. Por el momento es bastante pequeño y no ha sido difícil desembarcar allí ya que el público conoce a la golosina en sí. Si bien no hay tantos alfajores artesanales desarrollados como acá, les atrae el dulce de leche y eso de alguna manera abre las puertas.
Endeavor: Más allá del grupo inicial, ¿Cómo formaste tu equipo de trabajo? ¿Cuántas personas integran hoy el emprendimiento?
AF: En la parte productiva hay 30 personas. Y si sumamos todas las personas que están involucradas con Entre Dos, entre las Tiendas y Cafeterías así como las diversas áreas administrativas, comerciales, marketing y comunicación… suman aproximadamente 100.
El equipo lo fuimos formando y consolidando con el tiempo. Cuando fuimos creciendo convocamos a Profesionales para áreas que nos parecían estratégicas, como Calidad, Comunicación y Marketing, Recursos Humanos. Así consolidamos los equipos con los que veníamos trabajando y sumando profesionales para seguir creciendo.
Endeavor: ¿Llevan adelante alguna iniciativa con la comunidad?
AF: Al ser un emprendimiento que está en expansión, realizamos algunas actividades pequeñas por el momento, tenemos algunas colaboraciones por ejemplo con el Banco de Alimentos. Nosotros no planificamos las acciones pero si colaboramos en todo lo que ellos necesitan.
Es un objetivo para este año poder analizar y programar acciones para involucrarnos más activamente con la comunidad.
Endeavor: ¿En dónde les gustaría impactar?
AF: Estamos buscando la manera de poder reciclar todo el descartable que utilizamos en la fábrica como cartones y plástico. Nuestra idea es poder convocar a una organización que pueda ayudarnos a reutilizar y reciclar este material que descartamos y con lo que se pueda obtener ayudar o colaborar con alguna entidad o escuela de la zona de montaña que lo necesite.
Endeavor: ¿Qué clase de líder sos?
AF: Me es muy dificil responder esto… Creo que con Constanza sabemos escuchar a nuestra gente, que nos parece fundamental. Sabemos reconocer lo que cada persona puede aportar a Entre Dos y así intentamos potenciar las cualidades de cada uno. Como así también aprendimos a delegar aunque a veces nos equivocamos. Dar espacios para que todos sumen activamente.
Endeavor: ¿Qué valores tratás de transmitir con lo que hacés?
AF: Nuestros valores destacan la responsabilidad en el trabajo, el respeto hacia todas las personas, la honestidad que es innegociable, que más allá de ser un valor es uno de los pilares fundamentales de nuestra organización.
Endeavor: ¿Qué desafíos tenés actualmente?
AF: El desafío actual es sostener lo construído. Y sostener lleva implícito seguir creciendo porque es una consecuencia. Pero el sostener lo que ya tenemos es nuestro gran desafío.
Endeavor: ¿Pensás que emprender fue un antes y un después en tu compañía? ¿Por qué?
AF: Sin dudas que fue un antes y un después. Porque al consolidarse nuestro emprendimiento, se convirtió no sólo es nuestra fuente de trabajo y sostén para nuestra familia, sino para todas las personas que participan en nuestra organización. Es por eso que nos tomamos con mucha responsabilidad el trabajo diario.
Además, logramos desarrollar y colocar en el mercado un producto que no era fuerte en nuestra provincia. Hoy por hoy, el turista que visita Mendoza además de llevar nuestros vinos y aceites de oliva, se lleva alfajores.
Endeavor: ¿Cómo te ves de acá a 5 años? ¿Cuál es tu sueño?
AF: Dentro de 5 años veo a Entre Dos mucho mas profesionalizada que ahora, consolidada en el mercado local y también empezando a posicionarse en otros mercados fuera del país.
Endeavor: ¿Cuál es el consejo más importante que te dieron y que aplicás al trabajo?
AF: Más que un consejo, hay una premisa que nos guió: “no gastar más de lo que generamos”. Yo creo que eso es super sano, porque nos ha permitido no endeudarnos sino crecer genuinamente. Eso aplicamos a diario y si es un consejo que yo daría. Hemos sabido sacrificar tiempos de crecimiento, sin apurarnos. Y eso es muy sano para la empresa.
Otro consejo es ser perseverantes. Si tenes una idea o un proyecto, tenés que tener la perseverancia y la constancia para llevarlo adelante a pesar de las adversidades que obviamente se presentarán. Siempre habrán adversidades, para nosotros las hubieron, las hay y las van a haber. Mientras tengas un sueño por cumplir la perseverancia y constancia no pueden faltar.