En momentos donde parece no haber salida, una invitación a cambiar la mirada sobre los problemas.
Por María Julia Bearzi, Directora ejecutiva de Endeavor Argentina.
Podría empezar esta columna mencionando los datos alarmantes de la realidad argentina que todos conocemos, pero lejos de invitar al lector a encontrar soluciones estaría contribuyendo al síndrome argentino de la parálisis por análisis, una especie de epidemia que mantiene a nuestra sociedad en un loop constante de pensamiento que nos aleja de tomar acción. O en criollo, como me dijo una amiga emprendedora “el problema de la Argentina es que estamos siempre hablando de los problemas que tenemos”.
Y mi propuesta hoy es que cambiemos la mirada y hablemos de lo posible; de los hombres y mujeres que siguen apostando por el país, que quieren hacer algo para contribuir con el cambio, y emprenden para dar respuesta a los problemas estructurales en el sistema económico, en el desarrollo social, en la educación y tantos otros etcéteras. Ser emprendedor en Argentina significa mucho más que una persona que crea un negocio, es elegir buscar soluciones a los problemas que tenemos.
Por eso, para evaluar el potencial del emprendedor de escalar su negocio una de las primeras preguntas es ¿cuán grande es el mercado al que estás apuntando? O dicho en otras palabras: ¿a cuántas personas le podrías resolver un problema con tu negocio? Si hacemos una lista de la cantidad de problemas a los que nos enfrentamos, los que escuchamos y a los que les damos vueltas una y otra vez en nuestra mente, seguramente se nos ocurrirán un par.
Pensemos en las soluciones tecnológicas (o no) que usamos todos los días y resuelven nuestras necesidades diarias. Cuando idearon estos proyectos, sus fundadores estaban poniendo el foco en la solución, de haberse enfocado solo en el problema habrían conseguido paralizarse y procrastinar la acción. Y además, entrar en el continuo círculo de queja y malestar.
¿Te resuena? Probablemente esta es la forma que más cómoda nos resulta pero podemos elegir cambiar el chip y tomar acción. Emprender una solución para atacar ese problema nos ayudará a reducir la ansiedad, la incertidumbre, a ser parte de lo posible. Este es el tipo de mentalidad que promovemos y, creemos, nos hará crecer como país.
Se estarán preguntando a qué me refiero cuando hablo de problema. Según la RAE un problema es un conjunto de hechos o circunstancias que dificultan la consecución de un fin y yo agrego que puede ser desde una dificultad diaria, nimia, como tomar un taxi, hasta resolver la inclusión financiera de las personas que están fuera del sistema. Todas esas dificultades, propias o de la sociedad, son objeto de un emprendimiento y, en consecuencia, una forma de disminuir la incomodidad social.
En este contexto, en este país, el desafío siempre es arriesgarse pero a su vez este es el momento en el que surgen las mejores ideas, porque si mantenemos los ojos y la mente abierta, la creatividad florece. Además, nunca es el momento ideal para emprender, pero hoy más que nunca, necesitamos emprendedores que resuelvan los pequeños y grandes desafíos de la humanidad.
El camino no es fácil y también es solitario por eso hace más de 20 años que acompañamos a los emprendedores en su recorrido y recabamos experiencias, aprendizajes y lecciones que queremos compartir con todos aquellos que estén buscando resolver un problema. Como sentimos que podemos generar aún más impacto y llegar a más personas, hace muy poco tiempo lanzamos nuestro propio emprendimiento, Endeavor HUB, donde integramos años de experiencia trabajando con startups y también los unicornios del país.
Más allá de las batallas que habrá que librar, creemos en las personas y en el talento que tiene nuestro país por eso trabajamos incansablemente para acompañarlos y brindarles las herramientas que necesitan y así poder extender la cultura y la mentalidad emprendedora a todos los sectores de la sociedad. Creemos que esta mentalidad es la que va a sacar el país adelante.
Emiliano
Felicitaciones por el artículo! Simple y concreto, dejar de mirar y comentar los problemas y enfocarnos en soluciones.