Columna escrita por Maximiliano Landrein, cofundador y CEO de Agrofy y emprendedor Endeavor.
Tanto el agro argentino como su ecosistema tienen frente a sus ojos la oportunidad histórica de liderar, a nivel global, el surgimiento y consolidación del AgTech.
Los productores de nuestro país pueden ser parte de esta revolución invirtiendo en startups y fondos de inversión que fomenten el desarrollo de un nuevo ecosistema de empresas, que a su vez aumenten la productividad del campo, bajen riesgos productivos y hagan del agro un negocio más sustentable.
Estas nuevas compañías representan, además, una fuente de empleo de calidad y permiten que una nueva generación de productores encuentre oportunidades de desarrollo en sus localidades. Así se aporta valor agregado y se federaliza la economía.
El sector agropecuario argentino es súper competitivo a nivel global. Es un mercado desregulado, con márgenes chicos y que obliga a todos los actores de la cadena a innovar permanentemente para mejorar sus números. Esta vocación de mejora constante, más allá del talento y el conocimiento, hacen de nuestro país un lugar ideal para la revolución AgTech.
El AgTech Valley es una oportunidad que, sin dudas, podemos y debemos materializar.
Al know how agro se suma el talento que ya demostró el país en el desarrollo de compañías de base tecnológica. MercadoLibre, Globant, Despegar, Auth0. Hoy, el AgTech nos brinda la posibilidad única de unir dos universos en una nueva industria con un potencial sin techo.
En un país con 50% de pobreza y 13% de desempleo, el AgTech es una oportunidad que no se puede dejar pasar. Vemos convivir sectores de altísimo desempleo con otros, donde las empresas no consiguen los trabajadores necesarios. El sector de software, por ejemplo, tiene más de 20.000 posiciones al año sin cubrir.
Es imperioso unir las necesidades de formación con la oferta de capacitaciones. La base de esta revolución es tener talentos capacitados para los desafíos que se vienen. Y es posible.
Estamos frente a un océano azul de oportunidades que los mismos productores pueden impulsar por su espíritu innovador y emprendedor. Es hora de hacer del AgTech el nuevo motor del de la Argentina.